Dos Oros en los Premios Cinve 2015 para Bodegas Aura
Bodegas Aura debe su nombre al velo luminoso que envuelve los racimos al atardecer. Realiza su vendimia tras la puesta de sol, cuando la temperatura de la noche permiten preservar al máximo los aromas varietales. Se fundó en 2000, y su filosofía bodeguera está basada en la dedicación exclusiva a la elaboración de vinos blancos de alta expresión y orientada a alcanzar la máxima excelencia en el resultado.
Bodegas Aura, ubicada en Rueda (Valladolid), bodega consolidada en la Denominación de Origen Rueda, se ha alzado con dos Medallas de Oro en la XI Edición del Concurso Internacional de Vinos y Espirituosos 2015 (Cinve), celebrada en la Cúpula del Milenio de Valladolid y en la que han participado muestras procedentes de 13 países: Alemania, Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, España, Estados Unidos, Francia, México, Perú, Portugal, Túnez, y Uruguay, galardones con los que ha sido reconocida tanto su referencia más emblemática, Aura Verdejo Vendimia Nocturna 2014, como su edición limitada, Aura Selección Parcela Avutarda 2013, confirmándose como un referente de calidad en Rueda.
El jurado del prestigioso concurso, organizado y presidido por Jesús Guirau, ha premiado el minucioso trabajo de la enóloga Teresa Rodríguez, reflejado en sus dos vinos más especiales, de marcada personalidad y expresión.
Aura Verdejo Vendimia Nocturna 2014 es un vino de gran expresividad, que a la vista presenta un color pajizo, amarillo pálido con reflejos verdosos. En nariz ofrece una agradable paleta de aromas profundos y complejos con contundencia frutal y floral y delicadez mineral. Por último, en boca se muestra sabroso, untuoso, más fresco que en sus añadas previas, con una gran persistencia y amplitud, y un ligero toque amargo en su final que delata a la variedad.
Aura Selección Parcela Avutarda, es una edición limitada de 2.500 botellas, y es el primer Verdejo fermentado en barrica de la bodega. Es un armónico ensamblaje de Verdejo y roble, un vino elegante y muy expresivo que nace de Avutarda, la parcela más especial de la bodega, ubicada a 780 metros de altitud y marco de plantación más denso de lo habitual en la zona. El resultado es un vino muy especial, que sin perder las características de la uva Verdejo, gana en seriedad y complejidad, gracias a los matices aportados por la madera y a la propia lía durante la crianza.