¿Cómo se abre una botella de Oporto?
El cuello de una botella de oporto vintage, alto y ligeramente abombado, contiene un corcho muy largo. Si se conserva la botella durante más de veinticinco años, el corcho puede reblandecerse y volverse quebradizo y muy frágil, con lo que tenderá a romperse al intentar extraerlo con un sacacorchos convencional. En tal situación, es virtualmente imposible sacarlo de la forma normal.
Para evitar la rotura del corcho, se utilizan unas tenazas especiales para Oporto previamente calentadas al rojo vivo, bien en la chimenea o en la llama de un aparato de gas. Con ellas se agarra el cuello de la botella durante media minuto. Después se frota la parte caliente con un trapo húmedo o, si se le quiere dar un toque de clase, con una pluma mojada en agua fría, de esta forma, debido al cambio de temperatura, se oirá entonces un ligero crujido, que nos indicará que el cuello de la botella se ha roto limpiamente en círculo, dejando separada la parte superior del gollete que contiene el corcho.
El corcho, aún intacto y sobresaliendo un poco, habrá impedido que cualquier trocito de cristal haya caído al vino, aunque por regla general el corte es tan limpio que ni siquiera se desprende pequeños fragmentos
Un truco impresionante,¿verdad?, pero lo más importante es que funciona. Ademas de ser un ritual que aporta solemnidad cuando uno se enfrenta a un Oporto con unos cuantos años.